Pida la palabra
Soledad Moliner
307 pp., Aguilar
Recuerdo que hace unos años me causó curiosidad encontrar en las Lecturas Dominicales (cuando así se llamaban) de El Tiempo, una columna dedicada a responder dudas del lenguaje, escrita por una señora llamada Soledad Moliner. Las respuestas no eran tan pesadas como uno podría imaginar y, por el contrario, tenían una dosis de humor que hacían de esta sección una consulta amena.
Pues bien, acaba de ser publicado un libro que recopila las primeras 150 consultas aparecidas en la columna de Soledad Moliner, siendo el comienzo de una colección de cuatro volúmenes en los cuales la filóloga colombiana tratará temas relacionados con el lenguaje, las letras y la cultura.
Aprovechando esta situación, contactamos a Soledad Moliner vía correo electrónico y nos respondió las siguientes inquietudes:
¿Por qué se dedicó al estudio del lenguaje?
Creo que es una vocación, como ser música, monja o neurocirujana. Bueno, la aversión a los números también ayudó algo.
¿Cuánto tiempo le tomó la selección de las cuestiones presentadas en este libro?
Yo diría que unos tres meses. Aparecen prácticamente todas las primeras 150 consultas; había que evitar las repeticiones excesivas o inútiles, pero era importante que ciertos temas recurrentes se reflejaran en la selección. También resultaba aconsejable reunir preguntas y respuestas de índole variada: etimología, gramática, semántica, dudas sobre extranjerismos, morfología, etc.
¿Cuántas preguntas recibe diariamente?
Alrededor de diez. Aunque el número me alegra mucho, también me produce la frustración de no poder responder sino tres –máximo cuatro- en cada columna semanal en Lecturas.
¿Cuánto tiempo le toma la investigación?
Depende del tema. Procuro buscar lo que dijeron determinados filólogos sobre el asunto e intento averiguar cuál es el uso contemporáneo, no solo en Colombia sino en otros países hispanoablantes.
¿Sobre qué temas preguntan más?
Hace poco publiqué en la Revista Credencial las preguntas más frecuentes, que son las siguientes: formación de ciertos plurales (alelís y alelíes, jabalí y jabalíes, síes, noes), forma correcta para referirse al vaso de agua (frente al errado vaso con agua), género y mayúsculas en la Internet (personalmente defiendo la internet con minúscula), “a” inicial tónica (cambia el género por eufonía: el águila, el hacha), fecha (23 de octubre de 2006 por escrito; 23 de octubre del 2006 informalmente).
¿Cuál ha sido la inquietud más difícil de resolver?
Se han presentado cuestiones complicadas de morfología o gramática, que he procurado explicar de manera sencilla (la diferencia entre hiato y diptongo, el uso adecuado de gerundios, etc.). Sin embargo, hay solo dos que han quedado sin respuesta, a pesar de que pedí ayuda a los lectores: el origen de la palabra “mecato” y el vocablo para designar a las personas que nacen el mismo día del mismo año. Sobre esta última recibí algunas sugerencias, como “coetáneo”, pero aún ignoro la solución definitiva. Me temo que no existe… Hace poco dejé otra duda en el aire: el origen de la expresión “hacer el oso”. Aún recibo respuestas, pero no he podido determinar cuál de ellas es la verdadera. Quizá no haya aparecido todavía. Seguiré a la espera, porque es mejor ser prudente que hacer el oso.
De acuerdo con las solicitudes que le han hecho, ¿considera usted que el idioma español se está tratando bien o se está tratando mal?
Noto un deterioro creciente del español. Ocurre que cada vez aprendemos menos de él en la escuela, y más en los medios de comunicación. Y aunque se supone que los contenidos de estos medios están en manos de profesionales del lenguaje, hay que ver los horrores que se cometen a diario. En todo caso me llama la atención el interés que despierta la lengua en Colombia. He recibido mensajes en hojas de cuaderno, escritos a mano por personas que, según se puede inferir, no cuentan con una educación vasta ni con demasiados recursos, lo que no amilana su curiosidad por cuestiones de nuestra lengua.
Las consultas a Soledad Moliner pueden dirigirlas al correo electrónico soledadmoliner@hotmail.com