Director: David Frankel; Reparto: Meryl Streep, Anne Hathaway, Stanley Tucci, Simon Baker, Emily Blunt, Adrian Grenier; Género: Comedia, drama; Duración:109 minutos; País: Estados Unidos; Año: 2006.
Esta podría denominarse la versión cinematográfica de “Betty la fea”, claro que la protagonista lo único que debe mejorar de su aspecto es la manera de vestir, cosa que no solo cambiará. También lo hará con su visión del mundo y el afecto hacia sus seres queridos.
Miranda Priestly (Meryl Streep) es la directora de la revista Runway, la mayor publicación de modas del mundo. Por lo tanto ella es la mujer fuerte en este campo. Andy Sachs (Anne Hathaway) es la desaliñada joven que inesperadamente consigue trabajo como asistente de Miranda, un cargo que muchas modelos desean pero que, por ineptitud, no pueden obtener. Así, Andy comienza a involucrarse en el mundo de la moda, a no confundir marcas, a saber quiénes son los diseñadores exitosos y, naturalmente, a vestir bien. Sin embargo, a medida que va transcurriendo su labor junto a Miranda, la asistente se va dando cuenta de los sacrificios que tiene asumir en esa nueva vida y a preguntarse si realmente eso vale la pena.
La película muestra lo que no se ve de una revista de modas, la forma en que se realiza, la lucha por mantener una posición a cualquier precio, el tener que estar siempre bello y bien vestido si es que se quiere “ser alguien” y el drama de quién está inmerso en ese mundo pero no pertenece a él, ajustándose a la frase “aunque la mona se vista de seda, mona se queda”. David Frankel había mostrado algunos de estos aspectos en la exitosa serie “Sex and the city” pero, la verdad, creo que el drama en esta cinta se queda corto a pesar de la buena actuación de Meryl Streep. Se esperaba más de esta película, que en los Estados Unidos tuvo mucho éxito.